¿Que si soy feliz? Joder, que tiene que ver eso.- mire a mi compañero, a la persona a la que estaba a mi escucha, una de las pocas personas con las que tengo contacto, una persona joven de aspecto desgarbado que mientras me escrutaba con la mirada, grababa mis palabras y garabateaba sobre mi en su libreta me miraba afectivo- ¿Usted esta escuchando sus propias palabras?- dije algo exaltada frente a su planteo- Dígame que le hace dudar de mi felicidad y yo le contestaré que cualquier argumento que use es en vano. ¿Qué clase de persona relacionaría mi falta de cordura, de la cual yo dudo, con la felicidad? ¿No me ve feliz? Sinceramente pienso que yo soy mas feliz que usted, mas feliz que cualquiera de las personas con las cuales he tenido el placer de hablar, tan solo míreme… - moví mis manos enseñándole mi cuerpo- Vivo en una ilusión si, en una ilusión de la cual estoy muy orgullosa, la cual es el único sostén de motivos para vivir y eso… me encanta. – hablaba con el mismo tono con el que casualmente siempre terminaba espetándole mis palabras. Para mi era mas que notable la efusiva alegría que se traslucía en mi voz, con algo de cortesía, gentileza o algo parecido trataba de explicarle las complicadas conclusiones que habían pasado por mi cerebro a lo largo de toda mi vida- Están fascinante vivir tan solo para imaginar y experimentar mis propias ocurrencias, al principio no lo comentaba era mi juego intimo, mi delirio personal. Tal vez por que fuera un secreto, tal vez por que no estaba segura de que fuera algo normal… ahora eso ya no me importa. Al principio invente a una chica, que por pura casualidad simule crearla en clase y mi mejor amigo jugo conmigo hasta que comprendí que era demasiado, a ninguno de mis amigos les gustaba tanto la fantasía como a mi y decidí dejar el exceso de imaginación en publico.
Bueno al menos por un par de años creo. Luego, era un juego con mi mejor amiga, en ese momento me di cuenta, claro, deje de excusarme con mi propia infancia y empecé a entender que si seguía así lo mas probable es que me volviera loca. ¡Pero que mierda no me importo! ¡Que más daba, era como una droga para mí! Y lo mejor es que nadie podría arrebatármela.
Me encantaba acostarme en la cama e imaginar. En ese momento una de mis actividades, si se podría llamar así, favoritas eran los viajes en auto (en cuanto más largos mejor) sentarme y vivir mi imaginación mientras veía la vida pasar.
Pero disculpe,- mi voz cambio a enfado de un momento a otro, amaba actuar con él- no va pensar que todo era mariposas, arcoíris y sonrisas. No, por supuesto que no, los conflictos son el centro de las historias ¿no?- como era costumbre no espere su respuesta- Sin ellos el héroe no puede demostrar que lo es, y tampoco la hermosa damisela en peligro. El problema, era lo que le daba ese interés a mi historia que repetía y repetía. Me ponía en la piel de cada uno de los personajes y volvía empezar…
Luego de algún tiempo hasta me distancie de mis amigos para tener mas tiempo para pensar, decidí que esa iba a ser mi vida… una utopía, un sueño que a pesar que no era real, para los demás, si lo era para mi. Empecé como cualquier escritor esmerado en su gran obra a inventar excusas creíbles, pero luego mi menudencia aumento y el simple “Mi mama no me deja” para cualquiera sea la pregunta no faltaba nunca. Mis amigos empezaron a pensar (que loca la imaginación ¿no? a veces alcanza limites indispensables)- carcajeé con la ironía de lo que acaba de decir- creían- retome -que mi mama me mantenía encerrada, que tenia algún tipo de enfermedad… tantas cosas se decían de mi… y con razón. Una chica tan social convertida en un ser que encerrada en su cuarto, que solo comía y dormía era raro ¿No?- esta vez solo asintió, dejándome hablar como solía hacer, esperando expectante para seguir anotando en esa infernal libreta-
Bueno y como ya dije mi entelequia empezó a ser mi realidad, si ya se… esta mal bla bla bla. Pero dígame ¿Usted en los sueños siente miedo? ¿Siente alegría? Entonces, ¿que los diferencia de la realidad? Yo tengo esa respuesta la realidad es peor, en la realidad existen las cosas que uno no quiere que pasen y pasan igual… tampoco piense que no vivo la realidad, por falta de entusiasmo o algo parecido, es tan solo que las cosas con las que yo convivo en mi alucinación en el mundo real no existen…
Y como una cereza a la tarta,- dije sacando tema de algo que había atormentado uno de mis sueños debido a la frustración que me causaba, necesitaba contárselo, descargarme (algo que no me pasaba muy a menudo)- el toque final- me reí sola al recordarlo- Ase poco me entere que es pecado – volví a reír- el sacerdote que me visito dijo que como no colaboro con el mundo soy pecadora- me encogí de hombros y moví toda mi boca hacia un costado insinuando inocencia- ¿Es que las personas no son personas si no molestan a alguien?- hice un mohín de indignación y me recosté de costado sobre mi camilla mire la pared blanca pensativa y cerré los ojos lista para recomenzar mi vida, ese lapso de tiempo en el que no pare de hablar era tan solo el botón de pausa en mi historia. – Vivo en una ilusión en el que las personas en realidad no existen, (para ustedes)… ¿Y aun así soy una mala persona? Que loco ¿No?- esta vez dije esto como una despedida.
Escuche a mi visitante levantarse y sentí en mis ojos el cambio de luz. – Que duermas bien, Mel hasta la próxima… Te amo- se despidió. Abrí los ojos de repente sorprendida por sus palabras, todo estaba a oscuras y reinaba un silencio inquebrantable… seguramente lo soñé.
No lo corriegi haci que seguramente tiene muchos errores, el final es medio ¡Chan! pero bueno es lo que se me ocurrion en el momento tal vez despues lo saque, tiene algo que ver con lo de las locas que hablamos por eso lo posteo