Fortuita Soledad

Mi fortuita soledad me dejó totalmente confundida. No sé qué pasó ni cómo pasó.
Miro al espejo y no veo nada.
Mi corazón late desbocado en un mar de sentimientos propios... Mi único y maravilloso recuerdo es el eterno resplandor de aquellos ojos a la luz de la noche sin fin.
-Te necesito- dije con mi última bocanada de aire. Pero fue totalmente en vano, pensé que no me había escuchado. Con el pasar de los pocos minutos que me quedaban de vida, me di cuenta que no me quería, que no me necesitaba tanto como yo a él, que yo no era el oxígeno que inspiraba. Había sido tan importante que me hubiera asfixiado a mi misma por no hacerle daño. Me había engañado quitandóse de encima la poca dignidad que le quedaba... Así mismo, yo lo quería... lo quería tanto...
No tengo remordimientos por haber hecho lo que hice, lo volvería a hacer si fuera necesario. No me arrepiento de haberlo amado tanto, siendo ese mi error mortal...
En pequeño rincón de mi alma desolada, encuentro la paz y felicidad de aquellos días.
Tratando de encontrar aquel lugar tan mágico y a la vez siniestro pienso que la impavidez que tendría de volver a verlo me tortura. Yo sé que esa fue su intención, pero... no temo. Daría mi alma por volver a ver el deslumbre de sus ojos de topacio puro, por tocar su piel sedosa, por rozar sus rojizos labios.
Yo sabía muy dentro mío que era la persona más cínica y mentirosa que había tenido la desgracia de conocer, pero desechaba ese sentimiento porque quedaba eclipsado con sus pocas palabras que mostraban falsa sinceridad y con su belleza inalcanzable.
Por fin estuve ahí, el lugar en donde mi corazón se quebró con una simple y misera palabra. Y donde también se detuvo, sí, se detuvo por completo.
Los recuerdos llegaron a mí como un huracán, rápidos y demasiados fuertes.
Me acordé de un pequeño dolor que sentí en el centro de mi vientre, y el olor de aquella sustancia tangible y líquida, también demasiado roja. Traté de que se quedara en su lugar con mi manos, pero ellas rodeaban un objeto cortante, intentando sacarlo de dentro mío... Y en ese momento escuché aquella palabra...
-Adiós- Supe que no era un "simple adiós", era un adiós por siempre, y me atacó un dolor peor que el de mi estómago... el dolor de un corazón quebrado en mil pedazos.
Caí de espaldas en el césped húmedo que aquél bosque. Con todas mis fuerzas logré articular meras palabras:
-No te vayas- susurré. Su risa hizo que mis lágrimas frías desbordaran mis ojos y calleran por mis acaloradas mejillas. Era la risa más aterradora y siniestra que hubiera escuchado de su boca.
-Te necesito- dije con mi última bocanada de aire, pero el ya marchaba para no volver a verlo nunca más.

Me basé bastante en la saga de vampiros de Stephenie. Mi fuente de inspiración, además de los libros, es la música, los dos forman el elixir de mi vida
Espero que les guste, aunque no es muy bueno, no me deja totalmente convencida
Comenten, por favor
Saludos

Escribes muy bien, felicidades. Te quedó muy bien =)

Me gustó mucho_-_ Ta muy lindo!! escribes bien!!!

ME ENCANTAA!
pobreecitaa..
me encantaa como escribees..
adiooos ! (LLL)

Bell, que lindoo ! va a mi me gusto mucho, no le falta nada .

muy my bueno!!! tenes talento